22 DE SEPTIEMBRE, 2022

Ley de prohibición de plásticos de un solo uso ¿qué sigue después de su aprobación?

Desde el 2018, en Colombia se viene trabajando en la consolidación de un proyecto de ley que pretende prohibir los plásticos de un solo uso para 2030, una iniciativa que ya está posicionada en varios países y que tiene como objetivo detener la fabricación, comercialización y distribución de este tipo de materiales.

En junio de este año la ley 2232 fue aprobada y enlista 14 productos prohibidos, además de 10 excepciones y 2 alternativas sostenibles.

Durante todos estos años, parte de nuestra misión en el Grupo Plastilene ha sido participar activamente en la discusión sobre proyectos de ley en aras de tener una legislación responsable en torno a los plásticos y asegurar que todos los actores de la cadena se responsabilicen de su parte dentro de la economía circular.

Siempre priorizamos el respaldo técnico para argumentar la viabilidad del uso de estos materiales, evaluar los impactos ambientales de los sustitutos y promovemos el cierre de ciclo del plástico como una solución, por ejemplo, para el cambio climático.

Es satisfactorio saber que muchos de nuestros aportes durante la construcción de esta ley fueron tenidos en cuenta y sabemos que esto apenas comienza.

Los retos de la regulación e implementación de la ley

Si bien la normativa comienza a regir desde el 8 de julio de 2022, las prohibiciones se deberán implementar en plazos que van desde los 6 meses hasta los 8 años. Durante este tiempo todos los integrantes de la cadena de valor (empresarios, gremios, recicladores y Gobierno) tendremos que organizarnos y alinear nuestras estrategias para avanzar en el cumplimiento.

Por lo tanto, el próximo paso es encontrar las respuestas a una serie de preguntas y establecer una agenda de trabajo que permita trabajar sobre lo construido. Por ejemplo:¿Quién se encargará de hacer y verificar los análisis de ciclo de vida de los productos? ¿Quién certificará los productos fabricados con plástico reciclado? ¿Quién regulará lo relacionado con los biodegradables? ¿cómo se le va a comunicar al consumidor que un producto está exceptuado? ¿cómo evitar el greenwashing?

Muchos de estos temas, por no decir todos, los hemos venido trabajando desde la industria y tenemos importantes avances en el uso de herramientas de análisis de ciclo de vida, sellos de ecodiseño, sellos de contenido de reciclado, productos sostenibles y esquemas de economía circular.

Nos espera un trabajo fuerte por delante, sobre todo, en materia de relacionamiento con las entidades gubernamentales que se encargarán de reglamentar lo descrito en la ley. El camino será retador y confiamos en que la implementación de la ley no entorpezca los logros ya alcanzados de la industria, sino que fortalezca puntos sensibles como, por ejemplo, la educación ciudadana frente a la correcta disposición de los residuos plásticos.